jueves, 4 de agosto de 2011

Breve reflexión y propuesta acerca de la corriente de pensamiento económico dominante

La economía mainstream se basa en supuestos bastante endebles y así y todo se constituye como la corriente de pensamiento económico dominante.

Desde esa perspectiva, establecer un acercamiento al paradigma dominante o al capitalismo en general, más concreto, entendiendo que se trata de una teoría o un sistema de organización social que subscribe a una determinada ideología y a un particular interés de clase es vital para atacar sus puntos débiles, que son muchos y fácilmente perceptibles. La profundización en el conocimiento de sus supuestos provee las herramientas necesarias para la comprensión crítica de la teoría o del sistema mismo, al tiempo que deja en claro que es necesario elaborar alternativas válidas y diametralmente opuestas al curso económico predominante, que tengan como eje central, primeramente, a la cuestión social y al ser humano como existencia natural, al trabajador como hacedor de las riquezas, por ende el propietario originario de estas y a la sociedad plena como productora y reproductora de las condiciones de vida, mas no como mero factor de producción o agente de consumo.

La ciencia economía, en tanto ciencia social, debe ser el instrumento encargado de organizar a la sociedad en su relación con la reproducción de la vida humana, con la producción de los bienes indispensables para vivir y con la socialización de los medios de producción.

En principio, la pelea se tiene que dar en el campo de las ideas, que se proponga objetivos de mínima y de máxima. Los de mínima deberán tender a mejorar gradualmente las condiciones de vida de los sectores más desprotegidos de la sociedad, tratando de dotar de identidad de clase a los individuos que trabajen bajo relación de dependencia, a través de políticas que revaloricen el poder de la clase trabajadora. Es en este sentido que la política desplegada tendrá que atender y comprender a los nuevos proletarios; aquellos segmentos ocupados en los empleos originados en las últimas décadas; es decir, en áreas de servicios, comercio, trabajo informal o eventuales, etc., que vinieron a sumarse a la vieja clase obrera industrial y en es misma dirección interpelar al campesinado explotado, esforzándose por entender su idiosincrasia en virtud de la importancia de incorporarlos a la nueva sociedad en ciernes.

El objetivo de máxima tendrá a la política como la encargada de conglomerar y dirigir al nuevo sujeto social, ensamblar al intelecto colectivo en función de los intereses comunes y a favor de una inédita organización social, en donde cada ser humano aporte conforme a sus capacidades y en donde la riqueza sea compartida atendiendo a sus necesidades.

Queda claro que este pequeño borrador deja infinidad de puntos en el aire, pero en esencia es la base de partida de una propuesta ciertamente más pretenciosa, que es la de buscar alternativas generadas colectivamente, cuyo objetivo final sea la demolición de la actual sociedad capitalista y la construcción de una sociedad cimentada en la igualdad real, sin explotadores ni explotados, solidaria y que vaya dejando atrás, definitivamente, la prehistoria.

Marcelo Campos

(camposmarcelo555@msn.com)

(mcampos@ungs.edu.ar)

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El que responde es el economista argentino Fernando Hugo Azcurra:

¿Qué desafíos existenpara los quienes luchan por cambiar el actual orden de cosas?

“La unidad, porque el trabajador cuando se une se potencia. Por eso Marx plantea que el capital ha sido una fuerza revolucionaria en la historia de la humanidad porque derribó las barreras del feudalismo, abriendo la potencia social del trabajo. El proceso de producción y reproducción es de carácter social. No hay que pensar en el individuo aunque no hay sociedad ni producción y reproducción sin individuo. Pero cuando los individuos se unen producen relaciones y cosas que están más allá. El individuo no es solamente lo que existe sino que el resultado de relaciones mutuas, y en conjunto, crean superestructuras que a veces se autonomizan, como el Estado. Es una creación de los individuos y, sin embargo, se autonomiza y se vuelve en su contra cuando un sector de la sociedad emplea el Estado como un instrumento de sometimiento del resto. Ahora, como es una creación humana, también los hombres pueden cambiar esa entidad.”