El momento crucial será cuando la humanidad dé ese salto cualitativo que la deposite fuera de la prehistoria; cuando un sistema de organización social "humano" reemplace al actual. Cuando la sociedad se organice atendiendo necesidades naturales, en donde los medios de producción sean de propiedad común y en donde tanto las alegrías como las penas sean compartidas, con el mismo peso, por la sociedad en su conjunto. Por alcanzar esa Utopìa vale la pena vivir.
El que responde es el economista argentino Fernando Hugo Azcurra:
¿Qué desafíos existenpara los quienes luchan por cambiar el actual orden de cosas?
“La unidad, porque el trabajador cuando se une se potencia. Por eso Marx plantea que el capital ha sido una fuerza revolucionaria en la historia de la humanidad porque derribó las barreras del feudalismo, abriendo la potencia social del trabajo. El proceso de producción y reproducción es de carácter social. No hay que pensar en el individuo aunque no hay sociedad ni producción y reproducción sin individuo. Pero cuando los individuos se unen producen relaciones y cosas que están más allá. El individuo no es solamente lo que existe sino que el resultado de relaciones mutuas, y en conjunto, crean superestructuras que a veces se autonomizan, como el Estado. Es una creación de los individuos y, sin embargo, se autonomiza y se vuelve en su contra cuando un sector de la sociedad emplea el Estado como un instrumento de sometimiento del resto. Ahora, como es una creación humana, también los hombres pueden cambiar esa entidad.”